Para este evento, muchas cofradías de Granada, organizaron viajes para poder disfrutar del paso de palio de la dolorosa atribuida a la Roldana. Hermandades como los Estudiantes, San Agustín, Favores o la Estrella fueron algunas de las que fletaron autobuses hacia Sevilla.
A las 19:30 comenzaba el cortejo a salir desde la capilla de la hermandad, en la calle San Jacinto, con destino a Pagés del Corro. A la cabeza la banda de Cornetas y Tambores de la "Presentación al Pueblo" de Dos Hermanas, que a la altura de su sobrada calidad deleitó, con su amplio repertorio, a todos los asistentes. La Santísima Virgen pisaba Triana a las 20:15, a los sones de la Marcha Real, interpretada por la banda de la Oliva de Salteras.
Disfrutamos su presencia bajo el elegantísimo palio de estilo decimonónico, mecido en los doce varales de estreno diseñados por Juan Borrero y Sergio Cornejo, cincelados en el taller de Orfebrería Triana. Vestida con elegancia y buen gusto por Pepe Garduño, sin puñal ni Lignum Crucis y con adorno de ramos de cera, encontrandose la colocación de los costeros algo forzada, que nos devolvía una impronta casi olvidada en este palio del Domingo de Ramos sevillano. El adorno floral consistió en fanales de nardos que además de vistosos, aromatizaban sobremanera (¡que recuerdos, tristemente perdidos, de nuestra patrona!). Iba avanzando hasta la primera variación y allí, en la misma calle San Jacinto y en una fachada que se antoja hecha para su lucimiento, primera cerámica que se ponía en conmemoración de tan señalado aniversario; de más de un metro de altura, es una pintura hiperealista con la imagen de la Señora, toda enmarcada por vistosa yeseria.
Siguiendo el itinerario que hace la Hermandad de la Esperanza de Triana, en su regreso a la capilla de los marineros, continuó el discurrir la cofradía para visitar la parroquial de la Señora Santa Ana y en la calle Pureza, la capilla de los Marineros, en torno a las 00:45 (con tan solo con 15 minutos de retraso sobre la hora oficial). El paso palio entró por completo en el templo donde se rezó la salve ante las piadosas Imagenes trianeras, la revirá se realizó a los sones de la, imprópiamente interpretada, marcha "Soleá dame la mano", aunque el discurrir en general fue lento.
Tras la visita a la Esperanza de Triana fue camino de la calle Castilla para hacer la correspondiente a la hermandad de la O y luego volver para salir por la Plaza del Altozano y enfilar la calle San Jacinto, donde se habia colocado una alfombra (poco decorosa) y recogerse, no sin antes proceder a la bendición de un retablo cerámico del Señor, instalado durante la el recorrido glorioso que finalizó con una hora de retraso sobre el horario oficial (las 04:00 horas era la estimación que realizó la cofradía).
Calles y balcones lucian engalanados y desde estos, repetidas petalás al paso de la Virgen de la Estrella que levantó gran espectación congregando no solo a sevillanos, sino a cofrades de toda andalucia.
teneis oidas las hermndades q an pedido la dimicion al presi
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