DIEGO de SILOE, 450 aniversario de su muerte (III)

Siloe demanda a su maestro, Felipe Bigarny, por el impago de parte del último trabajo que el burgalés realiza antes de marchar a Italia, la sillería del coro de la catedral de Burgos.
En su nueva residencia conoce las nuevas formas artísticas, el Renacimiento y entra en contacto con los grandes artistas que le son coetáneos, entre ellos Miguel Ángel, es 1517.
Vuelve a su ciudad natal y vuelve a trabajar en la catedral donde pone en practica los conocimientos técnicos y artísticos adquiridos, para levantar la conocida como "Escalera Dorada"; lo que hace entre 1519 al 23. Admira la solvencia con que supo resolver el notable desnivel del terreno, entre la planta y la elevada puerta de Coronería, solo abierta los jueves y viernes santos. En  ella es evidente la influencia italiana, apoyándose en un dibujo de Bramante.
Entre su posterior influencia encontramos la escalera de la Ópera de París.
Debemos destacar la gran riqueza iconográfica, basada en trabajos de afamados grabadores italianos. Se completa, la singular escalera, con los antepechos en hierro sobredorado del rejero francés Hilario, de donde recibe el nombre.